martes, 15 de diciembre de 2009

Desatornillada

Desde ayer los tornillos y yo tenemos vidas separadas.

Por fin nos vimos las caras después de más de un año. Ahora se irán con mi padre que no sé muy bien para qué quiere semejante ferretería, pero la quiere.

Aquí están. La verdad es que no pensaba que eran tan grandes.

Yo me he quedado con los huesos del tobillo como un queso gruyere, de momento, pero estoy contenta :)

Con esta entrada termina la aventura biónica narrada en mipatachuli.

10 comentarios:

  1. Wow! Si que son grandes! y yo me pensaba algo llamado "tornillo" solamente por analogía, no tornillos de verdad!

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  2. elclientedeleroymerlin16 de diciembre de 2009, 13:41

    Seis agujeritos y nueve tornillos. ¿Se detuvieron en la pierna? ¿tienes algun parentesco con un tal Frankenstein ?

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  3. oooooh, ya no es la mujer biónica, y quiero mi tornillo!

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  4. sí, sí, lo de tornillos era literal, qué risa.
    ahora más que pariente de frankenstein parezco de la familia de los coladores pero todo se andará, nunca mejor dicho.
    y, marcos, para qué quieres tú un tornillo? te vas a hacer un llavero? mira que si ahora se empiezan a cotizar caro los tendré que subastar ;)

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  5. bueno guapa, pues ya te los han qitado... ahora a tomar cañas y demás!!!nos vemos el sábado???

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  6. maja! estoy un poco renqueante aún, no sé si para el sábado podrá ser que tengo el pie como un botijo y no aguanto nada de pie ¡malditas grapas!

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  7. I don´t speak Spanish, but I´m guessing, you had these screws somewhere in your body???

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  8. Yes. It seems incredible, doesn't it?

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  9. Gosh! You must be very happy that you finally don´t need them anymore.

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  10. Ya tenemos algo más en común, yo también he tenido tornillos en mi pierna, que quizás mi madre guarde, yo conservo la llave allen con la que me tenía que estirar medio milímetro por la mañana y medio por la noche. Lo mío fue alargamiento de tibia.

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