He estado desde ayer en plan Sherlock intentando averiguar de dónde era una pieza azul que (para mi horror) había aparecido suelta en el lavavajillas. Estaba tan intrigada/preocupada que consulté con mi Watson particular.
Dos horas después, en mi cocina:
Como suele pasar, la respuesta al enigma era más sencilla de lo que parecía. Menos mal que el lavavajillas estaba intacto, me da un telele si tengo que volver a la prehistoria del fregoteo manual...
Caso cerrado.
Bien por el oráculo!
ResponderEliminarPor cierto, el perillas está adquiriendo mucho protagonismo ultimamente. Para cuándo un spin-off??
ja, ja, ja
ResponderEliminarbuenísiiiiimo
Suele pasar. No te digo nada de las cosas que se suelen encontrar en el filtro de susodicho aparato. Mejor no mirar.
Bravo por watson y su perilla ramséssera!! y bravo por el nuevo formato de la página. Como curras Bego!!!!De donde sacas tiempo?
Besos
Jessi
no lo saco, se lo robo a otras cosas. este fin de semana en concreto a un trabajo de la uned megarrollo que tenía que hacer...
ResponderEliminarme apunto lo del spin off :)
Que buena la historia detectivesca!
ResponderEliminarelen
jajajaja una historia de misterios caseros que me tuvo en vilo e intrigada un día entero jajajaja
ResponderEliminarel spin-off a ver si se puede dedicar a esto de las begobolas full time , y voy pasando los guiones...
ResponderEliminarVamos, que "la solución lleva gafas". Si es que estaba claro.
ResponderEliminarsí, parecido :) yo también me acordé de lo mismo jajajaja
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