1. Montamos en un tren de vapor y estuvo muy bien aunque, como no teníamos los asientos reservados, nos tocó ir en el vagón de tercera, o sea, el que tenía ventanas sin cristales. Dos minutos después de salir de la estación teníamos carbonilla hasta en las pestañas y Víctor la cara toda negra porque estaba empeñado en sacar la cabeza para ver el paisaje. ¡Ríete tú de la contaminación de Madrid después de montarte en un tren de vapor!
2. Fuimos a una boda los tres juntos por primera vez. Yo no soy muy de bodas pero nos lo pasamos fenomenal bailando. Eso sí, al día siguiente me quería morir, no puedo competir con la energía de los cinco años...
3. Conseguimos que Víctor se comiera una hamburguesa por primera vez en la historia. No es que me emocione que se haya iniciado en el mundo fast food, que yo hubiera preferido que se comiera una zanahoria, pero si vivís con un niño que come mal porque no le interesa la comida ni comer, sabréis que cualquier ampliación voluntaria del menú es digna de celebración y entenderéis por qué me alegro.
4. Saqué rato para ir a uno de los mercadillos de La Retalera y para volver a coser. Eso siempre es motivo de celebración.
Abril ha empezado muy mierdero en el trabajo pero en casa las cosas van bien y eso lo compensa. Menos mal que además estamos de vacaciones :)
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My March favourite moments: getting on a steam train for the first time ever, dancing, getting our first hamburger together and finding some time to sew, yay!
Te tomo prestada la idea del Barco de Vapor, me parece un auténtico planazo. Ya estoy brujuleando por su web para reservar :)
ResponderEliminar¡Claro! No es tan bonito como el tren de la fresa pero es mucho más económico y breve (estás una mañana en vez de todo el día), a mí me pareció estupendo para ir con niños. Ya me dirás si te gusta :)
Eliminar¡Enhorabuena a Víctor por ese logro! Me apunto lo del tren, es un buen plan (gracias por el tip de las ventanas jaja). Y estoy deseando ver en qué se convierten esas telas. ¡A ver si mejora abril!
ResponderEliminartren de vapor + vagón sin ventanas = combinación fatal #truestory
EliminarXD
Lo del tren tiene una pinta bárbara y lo de los mercadillos de La Retalera ¡¡lo tengo en mi lista de cosas pendientes!! pero oye, que no hay manera de que me coincida bien la visita a Blanca.. ¡¡caguüenlaleche!!
ResponderEliminarBss Bego!!
El tren es una opción barata y entretenida de pasar una mañana sin ir muy lejos :)
EliminarEn mi caso sucede igual, el trabajo está ahí, ahí con sus cosas pero llegar a casa y ver la sonrisilla del peque hace que se olvide todo :)
ResponderEliminaral menos en eso tenemos suerte :)
EliminarA mí las bodas tampoco me van, pero cuando lo pasas bien el alguna es genial, más aún si bailastes con Víctor, menuda pareja. Un abrazo y a disfrutar de las vacaciones. Con el trabajo, ánimo, que a este curso ya le queda poco.
ResponderEliminarsí, que se pase pronto... el problema es que no pinta que vaya a mejorar el próximo tampoco... ains...
Eliminar¿COME Y BAILA? ¿EN PÚBLICO? Qué mayor se nos hace, Bego, pero qué contento sale! ^^
ResponderEliminar(y eso que no se le ve la cara en el tren... y mira que una sonrisa llena de dientes destaca sobre fondo negro xD)
LO SÉ jajajajaja
Eliminarhe cambiado la libreta donde dibujo, de A4 he pasado a A5 y tengo que hacer los dibujos más pequeños, no sé si me convence...
Qué pasote el tren de vapor!!!!! Peque se volvería loco, tengo que buscar algo similar por estos lares! O irme directamente a los tuyos! XDDD
ResponderEliminarBesotes!
Es una experiencia, nos iba adelantando la gente en bicicleta, no te digo más XD
EliminarNosotros hemos ido en la ruta del tren eléctrico de Cercedilla. Es muy recomendable: ves unos paisajes asombrosos, te llevas el picnic y paras por alguna ruta de senderismo fácil. Muy recomendable.
ResponderEliminarAkane también ha descubierto el fast food y le encanta (sobretodo el factor regalo). Para un apuro mejor eso que nada. Es muy rara para comer fuera y o le das macarrones o nada.
^^